miércoles, enero 04, 2006

Cierra una de las líbrerías más antiguas de Europa

Año 1760: el continente americano es una colonia europea, la incipiente clase burguesa vislumbra las posibilidades de las máquinas de vapor, en España reina Carlos III, Francia e Inglaterra están sumidas en la Guerra de los Siete Años... y en Tortosa abre la librería Viladrich.

Dos siglos y medio más tarde, el 31 de Diciembre del 2005, la Librería Viladrich bajó su persiana para siempre. En sus 245 años de vida había sobrevivido a guerras civiles, cambios culturales y económicos, revoluciones... para acabar muriendo por culpa de unas leyes del mercado sin sentimientos ni alma. Atrás quedan las actividades culturales, las tertulias literarias, el fomento de la bibliografía local... nada de esto continuará.

Sus propietarios hablan de la falta de cambio generacional y de la reducción del negocio por culpa de los cambios en la venta de libros de texto.... y de la competencia de grandes superficies y cooperativas (como
abacus )

Cuando una tienda como ésta cierra, desaparece una parte de nuestra historia. En palabras de su propietario “... se pierde un pedazo de la cultura de un pueblo”.

Me pregunto si el Estado no puede ayudar a conservar este tipo de establecimientos: comercios que, más allá de vender productos, forman parte del alma de las ciudades, de su cultura, de su historia. Especialmente cuando la Administración pública destina millones de euros a eventos intrascendentes, o dilapida en construcciones faraónicas el esfuerzo de sus ciudadanos. Pero en aras de la libre competencia es incapaz de evitar que estas pequeñas joyas de la cultura popular desaparezcan.

Encontrado en: La Vanguardia
Copia del documento en: De Tiendas - Documentos.

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